Por Rodrigo Pérez

El partido provincial alcanzó casi el 35 por ciento de los votos logrando afianzarse más allá de las elecciones ejecutivas. Es el tercer triunfo de JSRN, junto a los de Alberto Weretilneck, en junio de 2015 y el de Arabela Carreras en abril de 2019. Juntos por el Cambio desplazó al Frente de Todos al tercer lugar, que llevó al peronismo a su peor derrota en la historia política de Río Negro.

La estrategia de la provincialización: Con la elección primaria del último domingo y la proyección hacia la elección de noviembre, podemos realizar algunas estimaciones acerca de qué podría suceder en la elección general.

En primer término, se consolida la fuerza provincial. Sin dudas es relevante el triunfo de Juntos Somos Río Negro teniendo en cuenta que en la anterior elección primaria del año 2017 había quedado tercero, para luego retirarse de la contienda electoral. Esta vez el tercer lugar fue para el Frente de Todos.

Nadie arriesgaba mencionar un triunfo del partido provincial, por sobre los dos frentes nacionales. La victoria conseguida fortalece a Juntos, tanto al partido en su conjunto como a sus dos principales figuras: el senador Alberto Weretilneck y la gobernadora Arabela Carreras.

Es su primer triunfo en una elección legislativa y es un antecedente a tener en cuenta. Lo fortalece ya que, de repetirse el triunfo en noviembre, tendría dos representantes en la Cámara de Diputados de la Nación.

El domingo cuando veíamos el mapa de los triunfos electorales en las provincias argentinas en medios nacionales, solamente en dos provincias habían ganado partidos provinciales, Neuquén y Río Negro. La estrategia de la provincialización había triunfado -como tantas veces funcionó en épocas del radicalismo- y Juntos Somos Río Negro posicionó su marca.

Juntos por el cambio y su mejor elección en la provincia:

El triunfo de la lista Amarilla, Azul, Verde y Roja, que llevaba como precandidato al ex intendente de Cipolletti, Aníbal Tortoriello fue muy amplio. El 27 por ciento alcanzado en la elección PASO ubicó al dirigente cipoleño en el segundo lugar con posibilidades, además, en la disputa por el poder provincial en 2023.

Las restantes listas que disputaron la elección del espacio correspondieron a ex funcionarios y dirigentes del radicalismo de la capital provincial que estuvieron muy lejos de disputar el poder al ganador, quien se quedó con el 67,45 por ciento de los votos del espacio amarillo.

El Frente de todos y un ¿sorpresivo? tercer lugar :

La lista Unidad Azul, Celeste y Blanca que encabezó la funcionaria nacional Ana Marks quedó fuera de la contienda por las dos bancas en juego en esta primaria y deberá trabajar mucho para poder ser un espacio competitivo en la elección de noviembre.

Se trató de la peor elección del peronismo rionegrino en casi 60 años, no sólo en una elección legislativa, sino de todas las que se realizaron en la provincia desde su constitución como tal, quedando relegado al tercer lugar.

Totalizó el domingo un 25 por ciento, con menos de 90 mil votos. Muy lejos de lo obtenido hace 10 años atrás cuando en aquellas primarias el Frente para la Victoria lograba 200 mil votos (70 %) contra los 35 mil de la UCR, quedándose con las tres bancas para diputados nacionales.

Si bien entre los años 1983 y 2003 existió una predominancia radical, incluso sin cambios en el Ejecutivo, en la segunda etapa, desde el 2005, cambia la tendencia. Más allá de que en elecciones ejecutivas no se observó, el peronismo se impuso en todas las elecciones legislativas para elegir a los representantes rionegrinos en el Congreso Nacional.

Esto fue hasta el 12 de septiembre último. Teniendo en cuenta la crisis de la coalición de gobierno nacional y el resultado obtenido en la provincia, nada hace suponer que el resultado pueda cambiar.

Analista político