
Otra multa a una pesquera por arrojar desechos a la ría de SAO
El DPA le impuso poco más de 303 mil pesos a la empresa Río Salado por no contar con la aprobación para arrojar líquidos
El Departamento Provincial de Aguas (DPA) le aplicó una multa de 303.386,94 pesos a la empresa pesquera Río Salado por incumplir con el régimen de Control de Calidad y Protección de los Recursos Hídricos y arrojar líquidos residuales a la ría de San Antonio Oeste sin la aprobación correspondiente.
Esta misma firma, que posee su planta de procesamiento de pescados y mariscos sobre la costa del brazo de mar donde se encuentran los balnearios más populares además del muelle pesquero, ya fue sancionada en 2020 con 117.280 pesos por exceder los límites permitidos de vuelco.
En esta oportunidad, la medida la decidieron por no haber cumplido con obras para regularizar el sistema de evacuación, con el fin de proteger el medio natural.
La Resolución indica que en diciembre de 2021 constataron que el establecimiento estaba en funcionamiento y por lo tanto disponiendo sus efluentes en el causo marino al que los lugareños llaman “la marea”, pero no tenía la autorización otorgada por el DPA.
El trámite se había iniciado en mayo del mismo año, cuando le solicitaron al apoderado que debían mejorar las condiciones del efluente.
En respuesta, desde la compañía informó un cronograma de actividades “el cual no fue cumplimentado”.
En septiembre le recordaron nuevamente que no estaban autorizados a descargar en la ría, pero no hubo contestaciones, por lo que solicitaron a la Dirección de Protección y Conservación de los Recursos Hídricos que avanzaran con la sanción pecuniaria, de acuerdo a lo que determina la normativa para estos casos.
La medida, en la que intervino el servicio de asesoramiento jurídico del organismo, dispone dar intervención a la Dirección Comercial para que emita la factura que deberá ser adjuntada a la notificación de la penalidad.
Se advierte que, en caso de no verificarse el pago de la multa, se debe encomendar a la Fiscalía de Estado para que inicie el juicio de apremio.
Asimismo, el documento aclara que el cumplimiento no exime a la empresa la obligatoriedad de solucionar las deficiencias en el sistema del vertido.
La planta pesquera, como otras que funcionan en la localidad, ha aumentado su actividad en los últimos días debido al notable incremento en las capturas de langostinos en el golfo San Matías. Es un crustáceo que tiene un gran valor comercial por ser muy apreciado en la industria gastronómica dado su exquisito sabor. Sin embargo, su pesca también genera inconvenientes por los desechos, tanto sólidos como líquidos, que su procesamiento genera.