Continúa la controversia en Jacobacci por los becados municipales, ya no se discute quien paga sino que se está discutiendo la poca cintura política de los funcionarios municipales, en especial la del secretario de gobierno Gonzalo Adaime.

Días atrás el intendente decidió dar de baja a 40 becados y el encargado de comunicarlo fue el secretario de gobierno, les explicó que por la mala situación económica del municipio no podían tenerlos más, para sorpresa de todos días después el secretario se sacó fotos en el aeropuerto de Bariloche con el pasaje en la mano con destino a la ciudad de La Plata para jugar un torneo de paddle.

Desde lo social es tremendo el impacto ya que días atrás les explicaba a 40 familias que no tenían más trabajo, 40 familias que cobraban entre $700 y $1000 por semana, este funcionario cobra por semana 10 o 15 veces más que una persona becada.

Desde lo político es incomprensible semejante error, ya que es un suicidio político publicar este tipo de acciones en las redes sociales, algunos dirigentes políticos nos tienen acostumbrados a este accionar ya que es normal para ellos echar al que menos gana o en este caso al que más necesita, este funcionario, sabrá que es la necesidad? Sabrá que se siente no tener trabajo? Comprenderá lo impactante que es su accionar? Era necesario después de dejar sin trabajo a tanta gente viajar en avión a un torneo nacional de paddle ?  Cuando  una semana antes salió en todos los medios diciendo ponerse en el lugar de estos trabajadores,  victimizándose, diciendo que él lamentaba mucho darles ésta noticia … señor secretario los “ex jornaleros “no se van a un torneo en avión…  No era necesario tantísima hipocresía

Si bien es la vida privada de este funcionario y el viaje lo realizara con fondos privados, o no,  no deja de ser una burla, por el simple hecho de ser un funcionario.

Nos tenemos que acostumbrar como sociedad a exigirles a nuestros funcionarios que ellos tienen que dar el ejemplo, que no pueden accionar como si fueran empleados de una empresa privada, que hay detalles que se tienen que cuidar y no actuar con tanta impunidad, que sus sueldos los pagamos todos, que son empleados del pueblo y que por lo tanto deberán dar las explicaciones de sus acciones todas las veces que sea necesario.