La gastronómica fue la actividad principal del balneario rionegrino para la festividad. Y la paella sirvió para sumarle recursos al hospital de la villa.

Nadie quiso perderse los detalles de la preparación de la paella, que tuvo muchos interesados.

Una gran cantidad de público saboreó la paella gigante que un grupo de expertos cocineros del Golfo preparó ayer al mediodía, a modo de cierre de la primera edición de la feria de sabores que se desarrolló en la planta baja del complejo de torres ubicado a la altura de la Tercera Bajada.

El plato, que se vendió a beneficio del hospital Violeta Villalobos del balneario, fue preparado tras un meticuloso “paso a paso” que fue seguido por muchas personas que no quisieron perderse los secretos de una de las delicias típicas de la zona.

La cocción arrancó temprano, y al promediar las 14 del suculento almuerzo sólo quedaba el aroma flotando en el aire. “Realmente fue un éxito” consideraron sus organizadores.

La que también resultó exitosa fue la feria, que reunió a expositores de la Agencia Provincial de Desarrollo Económico Rionegrino (Crear). En distintos stands, los productores regionales ofrecieron degustaciones y vendieron sus productos, además de responder a las preguntas de los visitantes.

Justamente, la gastronomía fue la estrella durante el finde extra largo. Es que la afluencia de público no resultó demasiado relevante, y los prestadores consideraron que la mayoría de los que llegaron a la ciudad fueron propietarios de casas o departamentos, que aprovecharon para “escaparse” al mar.

Gasto en gastronomía

“Por eso, como el grueso de los que vinieron fueron los dueños de viviendas o propiedades, pienso que la llegada de gente no se sintió tanto en materia de alojamiento. Los que vinieron decidieron gastar en gastronomía, y darse un gustito ahí” consideró Wálter Sequeiro, titular de la cámara de Comercio local.

Con respecto al moderado movimiento, el hombre analizó que estuvo ligado “a la situación general del país”. Una opinión más crítica tuvo Carlos Rivas, uno de los referentes de la asociación de extrahoteleros. Consideró que la ocupación en estas fechas fue “muy floja” y ligó el tema a la “falta de difusión (de lo que ofrecía el destino ) del área de Turismo”.

Más allá de la oferta gastronómica, ayer se efectuó finalmente el hundimiento de la escultura de la patrona del mar y sus actividades, que fue especialmente realizada por la escultora local Rosana Gómez, a pedido de un grupo de la comunidad eclesiástica local.

La imagen de 600 kilos y 2 metros se construyó con un material especialmente acondicionado para tolerar la acción del agua. Ahora forma parte del parque submarino local, y fue colocada a la altura de Piedras Coloradas. Los amantes del buceo podrán visitarla.

 El dato

600 Kilogramos, pesa la imagen de la virgen Stella Maris que fue sumergida ayer en la zona de Piedras Coloradas..