San Antonio Oeste. En la primera audiencia del juicio por la muerte de Ilcen Pil, que tiene como imputado a Fernando Schmid, declararon siete personas.

Algunas de ellas fueron testigos directos del hecho, ocurrido en noviembre de 2015, cuando Schmid a bordo de un automóvil embistió a la nena, entonces de cinco años, y escapó.

Está acusado de  “homicidio culposo”, que prevé penas de entre dos y cinco años de cárcel.

En primer lugar el acusado subió al estrado pero tras confirmar sus datos personales se abstuvo de declarar.

Luego lo hizo su mujer, quien estaba embarazada en aquel momento, y relató que su esposo le contó lo sucedido cuando llegó a su casa. Allí la mujer se descompensó y fue al hospital, donde se quebró y confesó lo que le contó el marido.

Posteriormente pasó un vecino que vio el impacto contra la nena, y luego como el auto se alejaba.

El siguiente testigo fue el enfermero que atendió a la esposa del acusado. Recordó su estado al ingresar al nosocomio –un pico de presión- y su reacción.

Después habló la mamá de la nena. Fue una de las narraciones más dolorosas.  Expresó que había mandado a Ilcen con una de sus hermanas –que estaba embarazada- a un comercio cercano a cambiar una gaseosa. Recordó que a los pocos minutos le fueron a avisar lo que había sucedido, y que llevaron a su hija al hospital en un patrullero de la policía.

Siguió otro vecino que estaba con ellos en la casa de Ilcen, quien colaboró a auxiliar a la criatura.

Otra vecina conocida a la familia dijo que vio pasar a las chicas rumbo al comercio. Sostuvo que una de sus hijas vio como el auto la atropellaba y la arrastraba.

Por último declaró la hermana de la nena, con fue a la despensa. Dijo que Ilcen estaba enojada porque quería una gaseosa, y salió del local a paso ligero. Le pidió que frenara, porque ella estaba embarazada. Agregó que paró a acomodarse la calza, cuando escuchó el ruido del impacto.

La audiencia de hoy comenzará a las 9.30. Tanto la querella como fiscalía desistieron de dos testigos, por lo que se procederá directamente a los alegatos de las partes.

Primero será querella, luego fiscalía y finalmente la defensa.

Como el proceso oral y público se realizaba con el viejo Código Penal, se estima que en unos diez días la jueza Adriana Zágari dictará sentencia.

La familia de la víctima, representada por los abogados querellantes Gustavo Arbues y Néstor Torres, pedirán el máximo de la pena prevista por el delito.