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"Siento que se me frenó la vida": la increíble historia de un hombre que no existe en ningún registro del país

Desde entonces convive con 'mil y un' problemas en la pequeña localidad de Río Negro. "Hoy por hoy no existo", lamenta.

Es un vecino de Chichinales que, tras más de 35 años de una vida apacible y sin altibajos, de un día para el otro le dijeron que su número de DNI no le pertenecía y, tras cuatro años de idas y vueltas al Registro Civil y a la Justicia en Río Negro, no obtiene soluciones. Desde entonces convive con 'mil y un' problemas en la pequeña localidad de Río Negro. "Hoy por hoy no existo", lamenta.

- Buenos días, ¿cómo te llamás y cuántos años tenés?

- Hola, soy... o por lo menos eso creo, Matías Fernando Núñez. Y según lo que decía mi documento... tendría 41 años, aunque en realidad ya no sé.

Así comienza el diálogo con un vecino de Chichinales. Confuso. Un colega comentó que Matías vive un calvario desde los últimos años, porque no tiene DNI. Automáticamente se suele pensar, debe ser un error de registro, de tipeo... algo fácil de subsanar. Pero, parece que no.

Y con solo escucharlo, se pone en evidencia que el colega no exageró: este hombre narra -de corrido- los 'mil y un' problemas que enfrenta cada día para vivir, sin lo que a cualquier persona le corresponde: la certeza de su identidad.

"Yo ya no sé qué hacer", se lamenta. "No es simplemente un numerito: yo no pude inscribir a mi hijo cuando nació, y hoy está por cumplir cinco años y no tiene mi apellido, no puedo salir de mi casa a trabajar porque no tengo DNI y no puedo tramitar ningún permiso, no puedo trabajar en blanco, me cancelaron las tarjetas de crédito, tengo problemas con la AFIP... tuve problemas de salud por una mala praxis y no me quieren tomar los reclamos...".

Un calvario, sin vueltas. "Siento que se me frenó la vida", resume.

Tal es así que para volver a estar "en el sistema" le piden que haga una "inscripción tardía" aunque más que tardía parece ser eterna "hace más de un año que está en la Justicia y ni siquiera me han llamado", dice, y una "pericia para determinar su edad".

De la noche a la mañana

Matías contó que vivió una vida apacible, tranquila, hasta poco más de sus 35 años aproximadamente. Tiene una hija de 21 años que inscribió en el Registro Civil, sin problemas. Trabajó, pagó impuestos, sacó créditos... sin que nada fuera de lo común saliera a flote.

Pero cuando nació su segundo hijo, su vida se puso patas para arriba.

"Me dijeron su DNI no es su DNI, le pertenece a otro hombre, que vive en Tucumán. Usted no puede anotar a su hijo".

"Ahí empezó todo, yo ya no sé en qué creer. Mi partida de nacimiento tenía ese número, nací en Regina el 28 de octubre del 78 pero ahora ponen todo en duda. Y yo quiero tener en claro mi identidad y la de mi hijo. Hoy, lo que me dicen es que 'no existo en ningún lado'".

"Tengo a mi hija a mi nombre, aportes desde el 99 cuando empecé a trabajar, todo normal hasta que nació mi hijo. Mi señora le puso su apellido... y lo tomó mal, ¿cómo lo va a tomar?".

"Fui a un abogado, me dijeron que tenía que hacer una inscripción tardía. De Buenos Aires solo contestan que el número le pertenecía a otra persona. Hay que hacer todo nuevo, desde la partida de nacimiento y una pericia para saber mi edad...Fui hace meses porque la tiene que hacer un médico legista... y no me la dan. Todo está en manos del Juzgado de Familia de Regina. Nadie se hizo cargo hasta el día de hoy", denuncia.

Matías dice que no puede salir a trabajar, y no sólo no puede llevar el pan a su casa, sino que también lamenta no tener el dinero en mano (lo junta como puede, haciendo changas en las chacras) para pagar honorarios de abogados.

Cuenta que antes era electricista, sufrió en el 2006 una descarga de 13.000 voltios en un accidente en Paso Córdoba, que le dejó secuelas. Ahora "a escondidas", reconoce, sale cuando puede a podar a las chacras.

"Nunca tuve problemas con nadie. Yo solo quiero trabajar, estoy con problemas de salud, me operaron y quedé mal... y tengo que ver cómo sigo".

"Me buscaron hasta con la Interpol, para ver qué encontraban sobre mí, me dijeron que pude haber sido hijo de desaparecidos, por la época, ya no tengo a mis padres... es todo una gran confusión", lamenta Matías.

- ¿Qué es lo que más querés hoy?, consultó 

Quiero recuperar mi identidad. Tener mi DNI para poder dar el apellido a mi hijo, salir a trabajar como dice la ley... ni siquiera puedo renovar el carné de conducir... Tengo tres hijos y quiero darles lo mejor. Pero hoy por hoy, siento que no existo.



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