Un funcionario municipal que en soledad y con muy poca estructura logra secuestrar elementos que se venden en la vía publica sin las autorizaciones correspondientes.
El Dr. Nicolas Murgiondo, es el responsable del área de inspección municipal, una tarea bastante incómoda para el funcionario, y mucho más con la poca estructura con la que cuenta. Sin embargo durante el tiempo que lleva en esta temporada logro secuestrar diferentes elementos en la vía pública que no poseen autorizaciones municipales, procedentes de la venta ilegal.
Murgiondo es uno de los funcionarios que se lo puede ver al frente de los procedimientos junto a sus empleados del área, todo ellos empleados municipales, que en muchas situaciones arriesgan su integridad física cada vez que tienen que secuestrar elementos provenientes de lo ilegal. Es de público conocimiento que han sido víctimas de violencia física y amenazas de muerte.
En las fotos que ilustran esta nota se puede ver parte de las cosas secuestradas.
Según la información recabada, los enfrentamientos más comunes se da con parte de senegaleses y gitanos que se instalan año tras año en la villa turística con la finalidad de hacer negocios. Algunos alquilan locales comerciales donde ofrecen sus productos y en otras oportunidades salen a recorrer las playas ofreciendo los mismos.
Claro que no son con los únicos que se enfrentan diariamente, están los vendedores de todo tipo, desde los que venden fernet en la playa hasta los que venden ollas de cocina. Insólito pero real, Las Grutas es una marca turística pero con el correr de los años también se instaló como un lugar para poder vender lo que se quiera y en muchas oportunidades sin respetar las normativas vigentes.
De todas las irregularidades que se les presentan a diario a los inspectores municipales, hay una que no deja de asombrar, ya que en muchas oportunidades los propios turistas salen en defensa de los vendedores, indicando que no se los deja trabajaren paz. Claro no es lo más raro aún, porque se ha podido comprobar que en algunas ocasiones se detectó que bañeros y vendedores habilitados les avisan a los truchos mediante mensaje o llamados telefónicos diciendo, “cuidado ahí vienen los perros ” como una forma de tapar y cuidar a los ilegales.
No hay duda que el estado municipal tiene una falencia que año tras año crece y con el correr de las temporadas se pueden detectar diferentes mafias dedicadas a la venta ilegal callejera.
Será que llego el momento de ofrecer servicio de playa y no pensar solo en la recaudación de cada temporada?
Este interrogante debería ser la discusión del poder ejecutivo y legislativo municipal para lograr una actividad licita y que genere servicio para los turistas.
Cabe destacar que para cualquier habilitación comercial o venta, debería tener como requisito el certificado de antecedentes penales y en el caso de los extranjeros, la visa de trabajo correspondiente.
Será que no es posible cumplir con los mismos y es por ello que se instalan en la ilegalidad?? Si este fuera el caso deberíamos prevenir, concientizar a los vecinos, comerciantes y turistas alentando siempre el consumo de productos habilitados, de lo contrario estaríamos todos fomentado que se instale en nuestro recurso turístico la mafia de la venta ilegal, que consigo traería como ya ha sucedido, la venta de drogas en la playa.