La unidad sindical va tomando forma en Río Negro y los gremios estatales dieron el primer paso. Enviaron una fuerte señal al gobierno de Alberto Weretilneck sobre la fuerza que tendrá el reclamo por un aumento salarial -que equipare la inflación- para el segundo semestre, y advirtieron que habrá medidas concretas de acción directa.

En la mesa no estaba ATE. Pero docentes judiciales y upeceístas emitieron un comunicado:
“Los sindicatos de la provincia de Río Negro (UnTER, SITRAJUR y UPCN) nos reunimos y analizamos el contexto actual porque entendemos sumamente necesario alcanzar consensos para avanzar de manera conjunta en la exigencia de un aumento salarial en la provincia que se equipare al ritmo galopante de la inflación.

La realidad castiga y afecta directamente a las familias de los trabajadores que sufren las graves consecuencias de la devaluación y los tarifazos permanentes que demolieron el poder adquisitivo. En este contexto, unificamos criterios y acciones posibles para avanzar en defensa del salario de los trabajadores rionegrinos.

Hoy afrontamos una inflación salvaje, aumentos que impactan también en los medicamentos, una obra social que no puede garantizar la atención que corresponde y sumado a eso, el ‘plus’ que completa un ‘combo’ cuyo resultado es la pulverización y el deterioro del salario.

Los gremios reunidos denunciamos esta falta de sensibilidad social.

Sumado a todo este tremendo panorama surge la reforma por Decreto (683/18) del funcionamiento de la Fuerzas Armadas. Nos unificamos en el repudio a la ‘legalización’ de la represión al pueblo y a la militarización de las calles; una nueva avanzada y atropello a los Derechos Humanos en nuestro país.

Ante la falta de respuestas viables para la solución de los serios problemas salariales que estamos atravesando los estatales rionegrinos, continuaremos unificando criterios en la construcción de acciones políticas gremiales en defensa de todos los trabajadores provinciales y la diagramación de medidas concretas de acción directa”.