Un adelanto de la discusión salarial rionegrina se verificó en un encuentro informal del gobernador Alberto Weretilneck y el secretario general de ATE, Rodolfo Aguiar. No existió profundidad, pero si esbozaron ideas y posiciones, prometiéndose reglas claras para priorizar el diálogo.

Ese gremio estatal constituyó una resistencia permanente para el gobierno aunque, en los últimos meses, Weretilneck y Aguiar cambiaron sus actitudes, que culminó con un compromiso gubernamental para que ATE participe de la próxima negociación salarial. Ese asunto fue abordado en esa reunión y se definió que esa discusión será convocada para el miércoles 28, es decir, al otro día de la paritaria docente.

Fuentes gubernamentales confirmaron esa fecha y, además, que se cumpliría en la Función Pública. Ese ámbito sorprende porque Upcn es el único gremio integrante de ese Consejo y el secretario general de aquella organización, Juan Carlos Scalesi siempre se resistió incorporar a ATE, valiéndose en el actual marco legal.

Weretilneck se fue satisfecho del cónclave, contaron en su entorno. En diálogo con “Río Negro”, Aguiar admitió la reunión y el llamado de parte del gobierno para el 28. “No profundizamos -agregó- ningún lineamiento y fue informal. Sirvió para apuntalar el diálogo, que se está traduciendo en logros para los trabajadores, y definir la fecha de las paritarias salariales”.

La charla de una hora se cumplió el jueves en el café del Casino de Roca. Fue un reencuentro de dos viejos conocidos, ligados por afectos en los inicios de ambos, y enfrentados -en los últimos años- cuando Weretilneck, desde la gobernación, priorizó el reposo gremial y, en contrapartida, Aguiar sostuvo a ATE en las protestas callejeras y ocupaciones. El punto crítico se ubicó en mayo pasado cuando enfrentamientos de la policía con manifestantes sindicales, frente a la Legislatura, derivó en denuncias gubernamentales en la Justicia y consecuentes detenciones de gremialistas, entre ellos, Aguiar.

Los tiempos cambiaron. En diciembre, ATE participó de un acto en Casa de Gobierno de la firma del traspaso de los becados a contratados. El vínculo continuó reparándose y el secretario de Trabajo, Lucas Pica siguió con esa misión. Los contactos de whatssap se hicieron más permanentes y, finalmente, Weretilneck y Aguiar se juntaron el jueves para consensuar líneas generales de la próxima negociación.

El mandatario insistió en las limitaciones financieras y restricciones en la oferta salarial, centrada en el 15%, mientras el gremialista requirió buscar opciones. Delinearon alternativas aunque, en definitiva, la prioridad fijada fue extremar vías de diálogo y acuerdo.